jueves, 23 de julio de 2009

Eureka

El lavavajillas ya funciona.
Tres meses y dos días.

miércoles, 22 de julio de 2009

In Diana Jones

“Puedes comer del fruto de todos los árboles del jardín, menos del árbol del bien y del mal"
Dios Cruel y Vengativo, Gen 2:16-17

Tenemos un acuerdo tácito: nadie entra en la antigua habitación de Víctor. Nadie toca lo que hay allí. Nadie pregunta, nadie ve. En medio del pasillo no hay una puerta de los años setenta. No vi nada, agente. Nada. Soy un sencillo hombre de campo.
El piso tiene dos habitaciones grandes, una muy pequeña (convenientemente habitada por el hombre más corpulento del equipo) y un almacén de tamaño medio, anteriormente conocido como "la habitación de Víctor de cuando era niño". Con el paso de los años, después de que su familia se trasladara, alguien que no se fijó mucho puso un agujero negro que fue absorbiendo todo lo que había en los alrededores y no estaba anclado con un par de pernos del doce. El proceso se aceleró cuando empezamos las obras.
Para que os hagáis una idea, es más o menos como el almacén donde guardan los trastos que Indiana Jones va encontrando por el mundo (que, por cierto, lo alquiló la madre de Indi en un ataque de nervios cuando él cumplió diez años: "¡Cojona con el niño urraca! ¡Me tiene el comedor lleno mierda!", declaró). Víctor tardó ocho años en devolverme un libro con la excusa de que lo tenía guardado allí. Y no me quejé demasiado. Y Piña, el hámster, era un Gran Danés antes de desaparecer en esa habitación durante un par de semanas.
Diversos testigos, valientes e inconscientes, afirman que entraron y vieron una lata de Cherry Coke. Incluso así, cuando comentamos qué se podría hacer en esa habitación en el caso de que "alguien" la vaciase, Víctor sólo hace referencia al armario empotrado. Es muy grande, al parecer. ¿Por qué siempre habla del armario empotrado? Hay otro armario. ¿Es peor porque no está empotrado? ¿Hay clasismo en el mundo de los armarios? ¿Qué tiene dentro del armario? ¿Cuántos sacos de patatas caben en un armario empotrado? No debería haber dejado de ver Los Soprano.
Dicho sea de paso, y hablando de objetos ocultos, no todo es malo en el piso secreto de los misterios: el otro día encontré una Playboy. Edición especial: "Mujeres en la intimidad". Es un interesante, completo y detallado fotoreportaje que investiga por qué van las mujeres juntas al baño. Visto desde fuera, parece divertido.



 

lunes, 6 de julio de 2009

La delgada línea roja

Cuando enseñas fotos o le hablas a alguien de los hámsters hay dos reacciones:
1/ Es un bicho asqueroso.
2/ ¡Qué mono!
Evidentemente, los dos se equivocan.

Nuestro cuarto inquilino, Piña, es una hámster Roborovski. Los hámsters Roborovski nacen en grupos de 4 a 6 hamstercitos, después de un embarazo de 21 días:



Crecen rápido, y son fértiles (y sexualmente activos) a las 5 semanas de vida, lo cual es precoz incluso para los cánones adolescentes actuales. Viven 3 o 3 años y medio, en los que tienen como actividad principal dar vueltas a una rueda:



Vamos a hacer cálculos: una pareja de hámsters, ¿cuánta descendencia puede tener durante su vida? Hay que tener en cuenta que el tema del incesto no lo tienen claro y que, en general, si pueden dormir calientes hacen poco caso de las habladurías de la jaula. Tiran más seis tetas que seis carretas, dicen. Total, que es una progresión geométrica:

N(c) = N(0)( 1 + h/2 ) c

donde N(c) es el número de hámsters que tenemos después de la camada c, h es el número de hámsters por parto (6) y N(0) = 2, la pareja inicial. Como son fértiles a las 5 semanas y el embarazo dura 21 días, asumiremos que la fiesta empieza a los tres meses de nacer y que continua cada trimestre mientras el cuerpo aguanta: 14 partos, señora. Por lo tanto:

N(14) = 2 (1 + 6/2)14 = 536.870.912 hámsters.

Una anciana pareja de hámsters, en verano, tiene que entretener a quinientos trenta y seis millones de nietos, mientras sus padres se ganan el jornal y huyen del lindo gatito. Quinientos treinta y seis millones de niños en la piscina dando por saco. Quinientos treinta y seis millones de bocadillos de Nutella por la tarde. Sin olvidar que, mientras tanto, la abuela hámster estará embarazada otra vez. Éste es el motivo por el que viven tan poco: no es que su vida sea corta porque sí, es que desean morir.
Sigamos con las matemáticas. Si en una superficie de un metro cuadrado caben 1000 hámsters, ¿cuánto tiempo tardará la pareja de hámsters del ejercicio anterior en generar suficientes hámsters como para llenar toda la superficie del planeta?
Para quien no lo sepa, las tierras emergidas hacen un total de 148.940.000 km2, así que podemos llenar el planeta con sólo 148.940.000.000.000.000 hámsters. ¿Cúanto tiempo necesitamos, diríais? Haced los cálculos: siete años y tres meses1. Siete putos años. ¿Ha quedado claro? En sólo siete años podemos acabar viviendo sobre icebergs a la deriva, invadidos y exiliados por un montón de roedores peludos.
Los hámsters son astutos y peligrosos. Han esperado a que nos cargásemos las águilas, las serpientes y los extraterrestres verdes de "V", y ahora tienen vía libre. En cuanto nos descuidemos invadirán el mundo. Sólo nos queda la Vigilancia Permanente. Vigilancia Permanente, sin excusas.
Al plantearnos la operación piso-compartido tuve que informar a mis futuros compañeros: les dije que, acogiéndome, asumían la responsabilidad de impedir que los roedores llevaran a cabo su plan e impusieran su cruel tiranía. Javi, nervioso, se puso en pie, y, mirando al infinito, pensó en Marilyn y, ya de paso, en Kennedy: "No me pregunto lo que mi país puede hacer por mí. Me pregunto qué puedo hacer yo por mi país". Víctor, con lágrimas en los ojos, alzóse y gritó "¡¡¡Dios salve a la reina!!!". Y se fundieron en un abrazo fraternal y varonil. Estoy orgulloso de ellos.
Hemos asumido voluntariamente el sagrado deber de evitar que nuestra hámster Piña conozca varón. Cuando muramos, alguien se dará cuenta de que hemos salvado a la humanidad de la destrucción y esculpirá unas ruedecitas de hámster en las lápidas. Me faltan los epitafios. Se aceptan sugerencias.

1 El cálculo es un poco más complicado, dado que hay que tener en cuenta que los hámsters van muriendo de viejos. Pero básicamente es
N(c) = (N(c-1) - N(c-15)) * (1+h/2)
siendo N(c) el número de hámsters en la camada c, con N(0) = 2 y N(c<0)=0, y el 15 es debido a que un hámster vive 3 años y medio, o 14 camadas, así que muere en la decimoquinta.